miércoles, 30 de noviembre de 2016

II Domingo de Adviento Domingo 4 de diciembre de 2016

Lectura del libro de Isaías 11,1-10:
Aquel día, brotará un renuevo del tronco de Jesé, y de su raíz florecerá un vástago. Sobre él se posará el espíritu del Señor: espíritu de prudencia y sabiduría, espíritu de consejo y valentía, espíritu de ciencia y temor del Señor. Le inspirará el temor del Señor. No juzgará por apariencias ni sentenciará sólo de oídas; juzgará a los pobres con justicia, con rectitud a los desamparados. Herirá al violento con la vara de su boca, y al malvado con el aliento de sus labios. La justicia será cinturón de sus lomos, y la lealtad, cinturón de sus caderas. Habitará el lobo con el cordero, la pantera se tumbará con el cabrito, el novillo y el león pacerán juntos: un muchacho pequeño los pastorea. La vaca pastará con el oso, sus crías se tumbarán juntas; el león comerá paja con el buey. El niño jugará en la hura del áspid, la criatura meterá la mano en el escondrijo de la serpiente. No harán daño ni estrago por todo mi monte santo: porque está lleno el país de ciencia del Señor, como las aguas colman el mar. Aquel día, la raíz de Jesé se erguirá como enseña de los pueblos: la buscarán los gentiles, y será gloriosa su morada.

Sal 71,1-2.7-8.12-13.17 R/. Que en sus días florezca la justicia, y la paz abunde eternamente
Dios mío, confía tu juicio al rey,
tu justicia al hijo de reyes,
para que rija a tu pueblo con justicia,
a tus humildes con rectitud. R/.

Que en sus días florezca la justicia
y la paz hasta que falte la luna;
que domine de mar a mar,
del Gran Río al confín de la tierra. R/.

Él librará al pobre que clamaba,
al afligido que no tenía protector;
él se apiadará del pobre y del indigente,
y salvará la vida de los pobres. R/.

Que su nombre sea eterno,
y su fama dure como el sol:
que él sea la bendición de todos los pueblos,
y lo proclamen dichoso todas las razas de la tierra. R/.

Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Romanos 15,4-9:
Todas las antiguas Escrituras se escribieron para enseñanza nuestra, de modo que entre nuestra paciencia y el consuelo que dan las Escrituras mantengamos la esperanza. Que Dios, fuente de toda paciencia y consuelo, os conceda estar de acuerdo entre vosotros, según Jesucristo, para que unánimes, a una voz, alabéis al Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo. En una palabra, acogeos mutuamente, como Cristo os acogió para gloria de Dios. Quiero decir con esto que Cristo se hizo servidor de los judíos para probar la fidelidad de Dios, cumpliendo las promesas hechas a los patriarcas; y, por otra parte, acoge a los gentiles para que alaben a Dios por su misericordia. Así, dice la Escritura: «Te alabaré en medio de los gentiles y cantaré a tu nombre.»

Lectura del santo evangelio según san Mateo 3,1-12:
Por aquel tiempo, Juan Bautista se presentó en el desierto de Judea, predicando: «Convertíos, porque está cerca el reino de los cielos.»
Éste es el que anunció el profeta Isaías, diciendo: «Una voz grita en el desierto: "Preparad el camino del Señor, allanad sus senderos."»
Juan llevaba un vestido de piel de camello, con una correa de cuero a la cintura, y se alimentaba de saltamontes y miel silvestre. Y acudía a él toda la gente de Jerusalén, de Judea y del valle del Jordán; confesaban sus pecados; y él los bautizaba en el Jordán.
Al ver que muchos fariseos y saduceos venían a que los bautizará, les dijo: «¡Camada de víboras!, ¿quién os ha enseñado a escapar del castigo inminente? Dad el fruto que pide la conversión. Y no os hagáis ilusiones, pensando: "Abrahán es nuestro padre", pues os digo que Dios es capaz de sacar hijos de Abrahán de estas piedras. Ya toca el hacha la base de los árboles, y el árbol que no da buen fruto será talado y echado al fuego. Yo os bautizo con agua para que os convirtáis; pero el que viene detrás de mí puede más que yo, y no merezco ni llevarle las sandalias. Él os bautizará con Espíritu Santo y fuego. Él tiene el bieldo en la mano: aventará su parva, reunirá su trigo en el granero y quemará la paja en una hoguera que no se apaga.»

domingo, 27 de noviembre de 2016

Inicio del Año Litúrgico

           Iniciamos el  Año Litúrgico con el Adviento que significa venida de Jesús a la Tierra como Dios y Hombre verdadero para ser nuestro Redentor.  Dura 4 semanas antes de la Navidad y es un tiempo de preparación de nuestra alma para recibir lo mejor posible el regalo inmenso que significa que Dios mismo se haya hecho Hombre y haya nacido en nuestra tierra para venir a salvarnos.
            El primer domingo de adviento, al marcar el día de comienzo del año litúrgico, es necesariamente el domingo siguiente al de la fiesta de Cristo Rey (que señala el último domingo del año litúrgico).   Este año 2016, el adviento comenzará el domingo 27 de noviembre y terminará el domingo 18 de diciembre.

¿Cuáles son los símbolos de la Navidad?
ü  La Corona de Adviento
            La Corona de Adviento es  un signo externo de lo que es la preparación durante éste período que da inicio al nuevo año litúrgico de la Iglesia y que nos dispone a  recibir al Mesías. Es de origen germánico y expreso la alegría en la preparación a la navidad. Usualmente es redonda para representar el amor infinito de Dios, y de color verde como símbolo de la esperanza que nos trae su Hijo. Lleva 4 velas que se van encendiendo cada uno de los cuatro Domingos de Adviento. Cristo luz del mundo es simbolizado en las velas. Cada domingo se encenderá una y en familia se leerán citas bíblicas y se realizarán oraciones y peticiones recordando 4 momentos importantes previos al nacimiento de Nuestro Rey de Reyes.


ü  El árbol de Navidad:
            La confección del Árbol de Navidad es de origen indoeuropeo. Fueron los misioneros del medioevo que tomaron el signo para evangelizar a los bárbaros. Así para el cristiano representa a Cristo, verdadero árbol de la vida del cual fueron separados Adán y Eva, según el relato del Génesis. La estrella y las luces significan la luz que Cristo vino a traerle al mundo.
                                 

ü  El Nacimiento o Pesebre:
            Pertenece a una tradición cuyo origen se remonta a la época en que vivió San Francisco de Asís (1181-1226) quien para hacer más entendible el mensaje que se proclamaba en la celebración de la misa de navidad desarrolló el primer pesebre viviente del que se tiene conocimiento.
            En la capilla del Colegio Santa Rosa de Lima en Caracas, Venezuela, el pasado martes 22 de noviembre de 2016  el comité de delegadas del Sacramento de Confesión y Primera Comunión, se convirtieron en instrumento de Dios y dieron inicio a la construcción de este hermoso Pesebre.
            Está ubicado en la entrada de la capilla; cuenta con imágenes de distintos tamaños, las más grandes representan la Virgen María, San José, el Niño Jesús y el ángel Gabriel. Las demás piezas, entre ellas los pastores, ovejas, aldeanos, bueyes, ánforas, puentes.

Este hermoso trabajo está hecho para Dios. 









sábado, 26 de noviembre de 2016

Bodas religiosas Sor Purificación Maldonado y Sor Angustia Serrano - Caracas

           El pasado 5 de noviembre de 2016, se celebró en la Capilla del Colegio Santa Rosa de Lima Caracas - Venezuela, la Eucaristía en acción de gracias por los 50 años de vida religiosa de Sor Purificación Maldonado y 75 años de Sor Angustia Serrano.

            La Celebración inició a las 10:30 de la mañana, fue presidida por el Padre Guillermo y Padre José María Bueno; asistieron  hermanos de la Orden de Predicadores, Laicas Dominicas Asociadas a la Congregación y Comunidad de hermanas de la capital e interior del país.
            Fue una celebración emotiva y concurrida; los cantos fueron elegidos para vivir en pleno sentido cada momento, de forma que la liturgia nos pusiera en sintonía de unidad fraterna.

            La Comunidad preparó un agasajo para todos los invitados para así tener un momento de cercanía y fraternidad.

            Para las hermanas el recorrido  por  la  vida  durante  estos 50 años y 75 años de vida religiosa conllevan  un  sentido  profundo  de  todo  lo  que han vivido,  lo  esencial  es  y  será  siempre,  el  amor  de  Dios  que  dirige sus vidas  y  las  cuida  desde  dentro.  Solo  en  torno  a  su  amor,  se  ha  ido  forjando  su  verdadera existencia y su misión como vida consagrada.
            Solo queda dar gracias a Dios por los  años de servicio y amor a la Iglesia y Comunidad.













Lecturas Domingo 27 de Noviembre de 2016. 1er Domingo de Adviento

Lectura del libro de Isaías 2,1-5:
Visión de Isaías, hijo de Amós, acerca de Judá y de Jerusalén: Al final de los días estará firme el monte de la casa del Señor en la cima de los montes, encumbrado sobre las montañas. Hacia él confluirán los gentiles, caminarán pueblos numerosos. Dirán: «Venid, subamos al monte del Señor, a la casa del Dios de Jacob: él nos instruirá en sus caminos y marcharemos por sus sendas; porque de Sión saldrá la ley, de Jerusalén la palabra del Señor.» Será el árbitro de las naciones, el juez de pueblos numerosos. De las espadas forjarán arados, de las lanzas, podaderas. No alzará la espada pueblo contra pueblo, no se adiestrarán para la guerra. Casa de Jacob, ven, caminemos a la luz del Señor.

Sal 121 R/. Vamos alegres a la casa del Señor
Qué alegría cuando me dijeron:
«Vamos a la casa del Señor»!
Ya están pisando nuestros pies
tus umbrales, Jerusalén. R/.

Allá suben las tribus,
las tribus del Señor
según la costumbre de Israel,
a celebrar el nombre Señor;
en ella están los tribunales de justicia,
en el palacio de David. R/.

Desead la paz a Jerusalén:
«Vivan seguros los que te aman,
haya paz dentro de tus muros,
seguridad en tus palacios». R/.

Por mis hermanos y compañeros,
voy a decir: «La paz contigo».
Por la casa del Señor, nuestro Dios,
te deseo todo bien. R/.

Lectura de la carta del apóstol San Pablo a los Romanos 13,11-14:
Daos cuenta del momento en que vivís; ya es hora de despertaros del sueño, porque ahora nuestra salvación está más cerca que cuando empezamos a creer. La noche está avanzada, el día se echa encima: dejemos las actividades de las tinieblas y pertrechémonos con las armas de la luz. Conduzcámonos como en pleno día, con dignidad. Nada de comilonas ni borracheras, nada de lujuria ni desenfreno, nada de riñas ni pendencias. Vestíos del Señor Jesucristo.

Lectura del santo Evangelio según san Mateo 24,37-44:
En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos: «Cuando venga el Hijo del hombre, pasará como en tiempo de Noé. Antes del diluvio, la gente comía y bebía y se casaba, hasta el día en que Noé entró en el arca; y cuando menos lo esperaban llegó el diluvio y se los llevó a todos; lo mismo sucederá cuando venga el Hijo del hombre: Dos hombres estarán en el campo: a uno se lo llevarán y a otro lo dejarán; dos mujeres estarán moliendo: a una se la llevarán y a otra la dejarán. Por lo tanto, estad en vela, porque no sabéis qué día vendrá vuestro Señor. Comprended que si supiera el dueño de casa a qué hora de la noche viene el ladrón estaría en vela y no dejaría abrir un boquete en su casa. Por eso, estad también vosotros preparados, porque a la hora que menos penséis viene el Hijo del hombre.»